14.9.14

Planeta

Día 366.

Y todavía pienso en ti cada mañana. Y aunque he dejado de tocar el suelo donde te vi por última vez, que hoy más bien está inundado de frijolitos vaca, deditos de dios, algún romerito guerrero y una sobreviviente guayaba fresa, no hay día ni noche en que tu nombre no venga a mi memoria.

[Gracias por el tramo de vida compartido. 
Suerte donde quiera que ahora esté tu esencia, tu energía.
Ojalá nunca más sientas dolor].